Foto: Archivo | CN360
El gobierno de la isla ha decidido flexibilizar las regulaciones sanitarias especiales que rigen la importación de alimentos de origen animal por parte de viajeros y ciudadanos, abarcando productos como leche en polvo y embutidos.
Según el Centro Nacional de Sanidad Animal (Cenasa), que forma parte del Ministerio de la Agricultura, las regulaciones actuales para la importación de alimentos de origen animal “se fundamentan en normas internacionales aprobadas por la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) y están destinadas a prevenir la introducción de agentes biológicos que causan enfermedades perjudiciales para los animales domésticos, la fauna silvestre y los seres humanos (en el caso de las zoonosis)”.
La comunicación aclara que las importaciones de alimentos con fines comerciales se diferencian de aquellas que se reciben como donativos y de las que realizan viajeros o personas naturales. Las nuevas modificaciones se aplican específicamente a este último grupo.
Las flexibilizaciones permitirán la importación de ciertos productos provenientes de determinados países. En el caso de las conservas de productos del mar, así como la leche fluida UHT, condensada, evaporada y la leche en polvo, podrán ser de cualquier región geográfica.
Facilidades para la importación de productos de origen animal
– Conservas cárnicas (enlatadas) de bovinos, porcinos y aves, debidamente identificadas y de marcas comerciales reconocidas, procedentes de países que, por su situación zoosanitaria actual y acuerdos entre servicios veterinarios oficiales, son elegibles para Cuba (España, Portugal, Italia, Estados Unidos, Canadá, México, Panamá, Costa Rica, Nicaragua, Brasil, Argentina, Chile y Uruguay).
– Embutidos. Se autorizan temporalmente, provenientes de los países que, por su situación zoosanitaria actual y acuerdos establecidos entre servicios veterinarios oficiales, son elegibles para Cuba (misma lista de países mencionada anteriormente).
– Conservas de productos del mar que pueden originarse en cualquier área geográfica.
– Leche fluida UHT, condensada, evaporada y postres lácteos de cualquier procedencia geográfica.
– Leche en polvo originaria de cualquier región geográfica.
– Quesos maduros pasteurizados que pueden ser de cualquier área geográfica o elaborados con leches ultrapasteurizadas.
El Cenasa ha indicado que la lista de países elegidos hace referencia a la nación donde se fabricó el producto, según lo que se indica en su etiqueta, y no al país del que provenga el viajero.
Respecto a las prohibiciones absolutas para la importación de alimentos de origen animal por los viajeros, la entidad estatal cubana ha señalado que estas “responden a los requisitos zoosanitarios, teniendo en cuenta la situación zoosanitaria de los países de origen, que puede variar incluso dentro de la misma zona geográfica”.
Por ello, hasta el momento se han mantenido ciertas restricciones para la entrada al país de determinados alimentos.
Prohibiciones absolutas de importación:
– Carnes frescas, congeladas, deshidratadas o saladas, con o sin huesos; vísceras comestibles; productos cárnicos semielaborados (hamburguesas, picadillos, albóndigas, productos conformados como palitos de carne, nuggets y otros productos empanados, chorizos crudos, salamis, pastas untables, jamón crudo, salchichones y tocinetas crudos, fermentados, sobreasada, peperoni, cervelat y otros productos crudos fermentados) y productos semicocidos.
– Cualquier producto o subproducto de origen animal que contenga huesos.
– Leche fluida y derivados lácteos en general NO PASTEURIZADOS.
Al final de julio, la Gaceta Oficial de Cuba dio a conocer nuevas regulaciones para facilitar las importaciones no comerciales que comenzarán a regir a partir del 15 de agosto.
Entre las nuevas medidas se incluye el aumento de la cantidad permisible para importar ciertos artículos como computadoras, tablets, neumáticos, llantas y teléfonos móviles, así como un cambio en la definición del carácter comercial de la entrada de misceláneas considerando su valor y la diversidad de artículos.