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Cuba posee un gran prestigio en el ámbito internacional del tabaco. A comienzos de este año, Habanos S.A. informó un incremento del dos por ciento en sus ingresos en comparación con las ventas de 2021. Sin embargo, los célebres “puros cubanos” ahora enfrentan competencia desde su vecina República Dominicana.
Durante la pandemia del COVID-19, República Dominicana superó los mil millones de dólares en ingresos. Según un informe del semanario británico The Spectator, las exportaciones de tabaco en la República Dominicana continúan en aumento, convirtiéndose en la quinta exportación más importante del país, tras el oro, productos eléctricos, textiles, y equipamiento médico.
A pesar de que los cigarros artesanales de Cuba, que incluyen marcas como Cohiba, Montecristo y Partagas, son considerados por muchos como los mejores del mundo, el éxito de la República Dominicana se debe principalmente a un notable aumento en la producción de cigarros producidos de manera industrial.
Según el informe de medios británicos, la República Dominicana alberga actualmente más de 50 fábricas que emplean a más de 120,000 personas. Sin embargo, se reconoce que este impulso en la producción dominicana está inspirado en la manufactura y el prestigio del tabaco cubano.
Mientras Cuba ha tenido que diversificar sus mercados y buscar oportunidades en Europa y China, la República Dominicana ha podido acceder al mercado estadounidense. La mayor parte de los ingresos generados por cigarros provienen de EE. UU., que este año ha alcanzado un total de $22 mil millones, según el portal de estadísticas Statista.
En 2022, la tabaquería cubana Habanos reportó ventas por $545 millones tras la pandemia de COVID-19 y los daños causados por un gran huracán. Por otro lado, República Dominicana ha reportado un aumento del 17% en sus ventas en lo que va de 2023, alcanzando los 79.1 millones de dólares, de acuerdo con la Dirección General de Aduanas.