Foto: Jorge Luis Borges
El aumento en el monto de los subsidios y la reducción del plazo para llevar a cabo las obras asociadas son algunas de las nuevas regulaciones anunciadas por el gobierno cubano respecto a los fondos presupuestarios no reembolsables.
Estas disposiciones entraron en vigor este jueves, según lo expuesto en una conferencia de prensa por Vivian Rodríguez Salazar, directora general de la Vivienda del Ministerio de la Construcción de la Isla. Rodríguez Salazar explicó que el Acuerdo 9072 del Comité Ejecutivo del Consejo de Ministros incrementa los montos para la concesión de subsidios a personas naturales que no cuenten con solvencia económica.
De acuerdo con informes de medios estatales, Rodríguez Salazar indicó que, de acuerdo a los nuevos precios derivados del proceso de ordenamiento y en relación a las acciones constructivas pertinentes, el subsidio para la construcción de células básicas habitacionales puede alcanzar hasta 188 mil 560 pesos.
La cifra máxima establecida para obras de rehabilitación será de 133 mil 742 pesos, mientras que las conservaciones menores y mayores se fijan en hasta 14 mil 149 pesos y 38 mil 816 pesos, respectivamente.
Esta normativa ha sido publicada en la Gaceta Oficial Ordinaria No.57 y representa la tercera modificación a la Política de Subsidios, que ha enfrentado considerables retrasos dentro del Programa de la Vivienda, cuyo objetivo es abordar el déficit habitacional del país en un plazo de 10 años, según señala la agencia Cubana de Noticias.
La Gaceta establece que la financiación para la aprobación de los subsidios ya no dependerá del impuesto sobre las ventas de materiales de construcción, como se había hecho anteriormente, sino que será comunicada a las provincias por el Ministerio de Finanzas y Precios del Presupuesto Central del Estado para este año.
Según la ACN, para este año, el presupuesto que se ha notificado a cada territorio está destinado a concluir las más de 38 mil acciones que se encuentran pendientes en diferentes fases de construcción, incluyendo células básicas, rehabilitaciones y conservaciones menores o mayores.
Las autoridades locales podrán otorgar nuevos subsidios solamente en circunstancias excepcionales, como en casos de desastres naturales. Además, el tiempo para ejecutar la obra para la que se otorgó el subsidio ha sido reducido de 18 meses a seis.
Esto requiere una mayor agilidad tanto por parte del beneficiario como de las autoridades municipales para gestionar toda la documentación y los recursos materiales que deben generarse en el territorio para satisfacer esta demanda.
Otra de las modificaciones es la reducción de 45 a 30 días en los plazos para los trámites de los expedientes en las direcciones municipales de la Vivienda, y de 30 a 20 días en los gobiernos municipales. Asimismo, se amplía el período de validez de los expedientes a un año a partir de su recepción, ya que la normativa anterior establecía como término el año natural.
