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Las autoridades cubanas informaron al gobierno español sobre la recuperación de dos credenciales más para los periodistas del equipo de la agencia EFE en La Habana, de un total de cinco que habían sido retiradas. La devolución de estas credenciales será acompañada por la autorización para otorgar un visado de periodista a Juan Palop, el nuevo delegado de EFE en Cuba.
Con estas dos nuevas acreditaciones, EFE ha recuperado un total de cuatro, después de que se devolviesen dos acreditaciones el pasado domingo, lo que les permitió ser uno de los primeros medios en llegar a la casa de Yunior García, uno de los principales líderes de Archipiélago, y reportar lo que allí sucedió.
La presidenta de EFE, Gabriela Cañas, calificó esta nueva medida como “insuficiente” y “dilatoria”, al mismo tiempo que exigió la restitución de las acreditaciones para todo el equipo. Cañas también aseguró que la agencia continuará insistiendo en la necesidad de readmitir a su delegación, que tradicionalmente ha estado compuesta por siete periodistas.
Por su parte, Palop, quien fue designado por la agencia a finales de julio, podrá contar con su visado y acreditación “a partir del 28 de noviembre”, según confirmó la propia agencia. “Las decisiones de los últimos meses han dejado nuestro equipo debilitado. La retirada de todas las acreditaciones el sábado pasado y esta devolución gradual muestran una clara intención de desestabilizar nuestro trabajo periodístico”, añadió Cañas.
EFE ha sido una de las agencias más críticas con el gobierno cubano en los últimos años. En ese sentido, las autoridades cubanas retiraron a finales de agosto la credencial al coordinador del equipo y aún no han concedido el visado de periodista al nuevo jefe de la oficina.
El sábado pasado, el gobierno de la Isla retiró las credenciales de prensa a cinco periodistas de la agencia sin aclarar los motivos ni si esa medida era temporal o permanente, justo antes de las protestas convocadas para el lunes 15 de noviembre por grupos opositores que exigían cambios, las cuales no contaban con autorización del Gobierno.
Dicha decisión generó una condena unánime de organizaciones defensoras de la libertad de prensa, así como de muchos países e instituciones, incluyendo la Unión Europea y la ONU. Además, el Gobierno español convocó el domingo al encargado de negocios de la Embajada cubana en Madrid para solicitar explicaciones sobre esta decisión y exigir la restitución de las credenciales.
