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El Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba ha denunciado la presencia de un submarino de propulsión nuclear de Estados Unidos en las aguas de la Bahía de Guantánamo entre los días 5 y 8 de julio.
La Cancillería de La Habana emitió este martes una declaración en la que condena este acto, calificándolo de “escalada provocadora, cuyos motivos políticos o estratégicos son desconocidos”.
“La presencia de un submarino nuclear en este momento genera interrogantes sobre la razón militar detrás de este hecho en una región pacífica del mundo, cuál es el objetivo al que se dirige y qué propósito estratégico persigue”, señala la nota oficial.
El texto recuerda que la “base militar estadounidense ocupa ese territorio de 117 kilómetros cuadrados desde hace 121 años, en contra de la voluntad del pueblo cubano y como un vestigio colonial de la ilegítima ocupación militar de nuestro país, iniciada en 1898, tras la intervención expansionista en la guerra de independencia de Cuba contra el dominio colonial español”.
Se añade que este enclave ha carecido de importancia estratégica o militar para Estados Unidos durante muchos años, y su permanencia responde únicamente al objetivo político de menoscabar los derechos soberanos de Cuba.
El Minrex también argumenta que la utilidad práctica de esta instalación en las últimas décadas “se ha limitado a ser un centro de detención, tortura y violación sistemática de los derechos humanos de decenas de ciudadanos de diversos países”.
Por otra parte, la declaración señala que “los Estados Unidos han establecido más de 70 bases militares en la región, con diversos grados de permanencia, así como otras formas operacionales de presencia militar, mientras que sus altos mandos militares han manifestado públicamente su intención de utilizar su poderío bélico para asegurar las ambiciones estadounidenses sobre los recursos naturales de América Latina y el Caribe”.
Finalmente, el Ministerio advirtió sobre el peligro que representa la presencia y circulación de submarinos nucleares de Estados Unidos en la cercana región del Caribe.
Aunque probablemente no habrá pronunciamiento o aclaración oficial por parte de Washington o el Pentágono, la presencia de este buque militar en la zona podría interpretarse como una respuesta al reciente acercamiento de La Habana con Moscú, lo que podría marcar el inicio de una Guerra Fría 2.0.
A pesar de que la declaración indica que la presencia del submarino ocurrió la semana pasada, el Minrex realiza este pronunciamiento el 11 de julio, fecha en la que se conmemora el segundo aniversario de las manifestaciones populares que se extendieron por más de 70 pueblos y ciudades de la Isla.