Foto: Roy Leyra | CN360
Texto: Hugo León
Cuba comenzó el año con un leve crecimiento en sus exportaciones, destacándose el níquel, la miel, el carbón vegetal y el tabaco, entre otros indicadores positivos como el comercio interior. Sin embargo, el gobierno cubano reconoció este martes que estos avances aún no son suficientes para frenar la inflación.
En el Consejo de Ministros, el titular de Economía y Planificación y Viceprimer Ministro, Alejandro Gil Fernández, señaló que también se observa una ligera recuperación en el turismo, y que la circulación mercantil minorista creció un nueve por ciento.
No obstante, lamentó que esto «no es suficiente para dar inicio a un proceso de contención de la inflación, que sigue siendo muy elevada», ni para satisfacer la demanda de bienes y servicios de la población, según informa el sitio oficial de la Presidencia de Cuba.
Gil indicó que al finalizar enero no todos los indicadores mostraron un comportamiento favorable como los mencionados anteriormente.
Para él, es necesario “acelerar los esfuerzos y no celebrar lo logrado de manera triunfalista”.
El funcionario aseguró que recientemente se han implementado importantes medidas destinadas a superar el complejo contexto de la economía nacional, y es crucial aprovecharlas.
Mientras tanto, la inflación récord en Cuba continúa tensando la ya frágil economía familiar, en medio de una escasez que ha llevado a que los salarios pierdan capacidad de compra y los precios de muchos productos se hayan multiplicado por 10 o 20 en el último año.
Reformular el sistema de trabajo del gobierno
Uno de los temas abordados en la reunión del Consejo de Ministros, según la Presidencia de Cuba, fue el análisis del “perfeccionamiento del sistema de trabajo del Gobierno”.
El presidente Miguel Díaz-Canel declaró que este perfeccionamiento está “orientado a la base” y busca que haya más tiempo para vincularse con ella.
El comunicado del gobierno no especifica si se trata de crear más espacios para que la población se acerque a los líderes, exigir que estos dediquen más tiempo al contacto con los barrios, o si implica cambios en el sistema de ascensos dentro del propio Gobierno.
Lo que sí enfatizó el mandatario fue que si no se va a la base “no estamos solucionando nada”.
Por su parte, el Primer Ministro cubano Manuel Marrero mencionó que las circunstancias actuales requieren reformular la manera de trabajar para que la actividad ejecutivo-administrativa se centre en atender los problemas realmente importantes para el pueblo.
Además, Marrero adelantó que se buscará optimizar el rendimiento de las actividades de los organismos de la administración central del Estado, las entidades nacionales y las administraciones locales; así como fortalecer el trabajo del Poder Popular, en especial de los delegados; y asegurar un ejercicio gradual de la autonomía del municipio como unidad político-administrativa primaria.