Foto: Roy Leyra
La continuidad del curso escolar es una de las principales preocupaciones de los estudiantes cubanos, dadas las complejidades del actual escenario epidemiológico.
En este contexto, la ministra de Educación, Ena Elsa Velázquez Cobiella, informó en el programa Mesa Redonda que se han establecido dos etapas de trabajo. La primera abarca de abril a julio de 2021, con el objetivo de garantizar la continuidad de los servicios educativos mediante la combinación de diversas modalidades de atención educativa y el trabajo comunitario a nivel de los consejos populares.
La segunda etapa se desarrollará entre septiembre de 2021 y enero de 2022, con el fin de asegurar la conclusión del curso escolar 2020-2021 y preparar el inicio del siguiente.
“Considerando el comportamiento de la situación epidemiológica y el esquema de vacunación diseñado, se prevé que esta etapa se lleve a cabo de manera presencial”, indicó.
Dependiendo del contexto sanitario, los estudiantes podrían regresar a las aulas en septiembre, utilizando las adaptaciones curriculares preparadas por diversos especialistas.
Entre los principios para los posibles escenarios en la conclusión del curso 20-21 y el inicio del 21-22, la ministra subrayó: la calidad del proceso educativo, incluso en los escenarios más complejos, así como las acciones complementarias al desarrollo de las actividades docentes televisivas mediante correos electrónicos, redes sociales, la radio, los telecentros y las páginas web de las instituciones educativas. Además, enfatizó que no se realizarán evaluaciones sin antes haber trabajado de forma presencial los contenidos esenciales de cada grado y asignatura.
En su participación en televisión, Velázquez Cobiella destacó que se han diseñado acciones para un escenario favorable en territorios e instituciones que no han detenido el curso escolar, concluyendo en julio de 2021 e iniciando el próximo curso 2021-2022 en septiembre de este año. Ejemplos de ello son Las Tunas, algunos municipios de Cienfuegos y Holguín, así como escuelas, especialmente rurales, en Santiago de Cuba, donde más de 300 instituciones educativas han permanecido en funcionamiento, principalmente en la educación primaria.
“Aquellos que han logrado continuar el curso escolar, ya sea sin o con pequeñas afectaciones, no deberían afectar las fechas establecidas en el calendario escolar”. Para aquellos con un panorama menos favorable, se prevé reanudar el curso entre junio y julio, culminando el 22 de enero de 2022, y comenzando el próximo curso el 31 de enero.
En las zonas que se encuentran en «escenario crítico», se planea reiniciar las actividades docentes en septiembre, disponiendo de 19 semanas para finalizar el curso escolar, que concluiría el 22 de enero.
Con respecto al curso escolar 2021-2022, se espera que comience el 31 de enero de 2022 en la mayoría de los territorios del país. Asimismo, se mantendrá la semana de receso escolar de la Victoria en abril y se respetarán las vacaciones de verano para todos los niveles educativos, finalizando el curso escolar el 29 de octubre de 2022.
La representante del sector enfatizó que el diseño presentado está condicionado a la situación epidemiológica del país. El MINED cuenta con 200 instituciones educativas que operan como centros de aislamiento, así como un número considerable que actúan como vacunatorios.