Foto: National Geographic
De acuerdo con la Gaceta Oficial No. 59 Extraordinaria, publicada el 1 de octubre, los afectados por el Huracán Ian en Pinar del Río y otras provincias no recibirán de forma gratuita materiales de construcción, tanques de agua ni colchones. En realidad, deberán abonar el 50% del costo o solicitar créditos bancarios o subsidios para cubrir estos gastos.
En este contexto, el Consejo de Ministros, en el documento, acuerda que el presupuesto del Estado financie el cincuenta por ciento de los precios de venta de los materiales de construcción para las personas cuyas viviendas han sufrido daños totales o parciales, así como para los tanques de agua y colchones que se vendan a los damnificados en Pinar del Río, Artemisa, Mayabeque y La Habana, inclusive en el municipio especial Isla de la Juventud.
“Las personas cuyos ingresos no sean suficientes para adquirir los productos mencionados anteriormente pueden acceder a créditos bancarios, solicitar subsidios para la compra de materiales de construcción que corran a cargo del Presupuesto del Estado y, en el caso de los colchones, pedir financiamiento a través de la Asistencia Social, conforme a lo establecido por la legislación vigente”, se expresa en el apartado segundo.
Para este propósito, se designa como responsables a las ministras de Finanzas y Precios y del Comercio Interior, así como a los gobernadores provinciales de Pinar del Río, Artemisa, Mayabeque y La Habana, y al Intendente del municipio especial Isla de la Juventud, quienes deberán establecer los procedimientos y mecanismos de información y control necesarios para la implementación de este acuerdo.
Es importante recordar que Ian, además del desastre energético, causó daños en viviendas, edificios públicos, fábricas, campos, cultivos de tabaco y carreteras. Solo en Pinar del Río se erigieron 55 refugios, evacuando a cerca de 50,000 personas.
Datos oficiales indican que, en este territorio, más de 100,000 viviendas resultaron afectadas. Andrés Marín, director provincial de Vivienda, resaltó que esta cifra equivale a aproximadamente el 60 por ciento del fondo habitacional, destacando que los principales daños se encuentran en las cubiertas, teniendo en cuenta el alto porcentaje de cubiertas ligeras presentes en la región occidental, según reporta el medio estatal Trabajadores.