Foto: Roy Leyra | CN360
A partir de mayo de 2022, la Embajada de Estados Unidos en La Habana reanudará la tramitación limitada de visados de inmigrante, según anunciaron hoy desde el puesto diplomático estadounidense.
Según la información publicada en los sitios oficiales de la embajada en redes sociales, se priorizará a los solicitantes de la categoría IR-5 (padre o madre de un ciudadano estadounidense).
Este cambio se inscribe dentro de una expansión general de las funciones de la Embajada, con el objetivo de facilitar el compromiso diplomático y de la sociedad civil, así como ofrecer servicios consulares, según destaca la página web de la embajada.
La Embajada en Georgetown, Guyana, seguirá siendo el principal punto de tramitación para la mayoría de los solicitantes cubanos de visas de inmigrante, mientras se trabaja para reanudar estas gestiones en La Habana, señala el comunicado.
Se comenzará a procesar los casos de la categoría IR-5, reconociendo la prioridad de los familiares inmediatos y los desafíos específicos de edad, salud y movilidad que enfrentan estos solicitantes, aclara el sitio web de la embajada.
Los solicitantes de IR-5 que fueron notificados de que su caso está listo para ser procesado antes del 1 de abril de 2022 continuarán siendo atendidos en la Embajada en Georgetown; dado sus recursos limitados, la Embajada de Estados Unidos en La Habana no aceptará solicitudes de traslado de quienes tenían previstas entrevistas en Georgetown.
Según el comunicado, no hay una fecha exacta para que la Embajada en La Habana comience a procesar toda la gama de servicios de visado, pero la reanudación actual es el primer paso hacia la ampliación de estos servicios, que serán evaluados para su extensión a medida que las condiciones lo permitan, en línea con las instrucciones del Presidente Joe Biden al Departamento de Estado.
Desde 2017, el puesto consular redujo su personal al mínimo después de que el entonces presidente Donald Trump alegara incidentes de salud que describió como ataques sónicos que afectaron a sus diplomáticos en 2016 y 2017.
Desde entonces, los cubanos han tenido que viajar a países terceros como Colombia y Guyana para solicitar la visa.
La reanudación gradual de estos servicios se produce en medio de una tensa situación migratoria entre Cuba y Estados Unidos, ya que decenas de miles de cubanos han llegado ilegalmente a territorio estadounidense en los últimos meses.
La Habana responsabiliza a Washington del éxodo de personas hacia EE. UU., argumentando que incumple con el compromiso de proporcionar 20,000 visas anuales a cubanos y que fomenta la inmigración ilegal a través de una política que beneficia a quienes llegan desde la isla caribeña.