Recientemente, se ha descubierto una cuenta de mayólica en el área que los expertos consideran el lugar fundacional de la antigua villa de Sancti Spíritus, lo que lleva a un total de cinco objetos de este tipo hallados por el Gabinete de Arqueología de la Oficina del Conservador de la ciudad durante excavaciones e investigaciones de campo.
Según una publicación en Facebook del arqueólogo Orlando Álvarez de la Paz, el nuevo hallazgo se encuentra, al igual que las cuatro piezas anteriores, en el área 3 del asentamiento.
Se cree que estos objetos fueron creados por los aborígenes, quienes utilizaron fragmentos de vasijas de mayólicas Columbia Liso, introducidas por los europeos desde tan temprano como el siglo XVI, de acuerdo con lo que indica el especialista.
Este descubrimiento tiene un gran valor para los investigadores, ya que evidencia el proceso de interacción entre dos culturas en un mismo espacio y durante un mismo periodo de tiempo. Este argumento es utilizado también por los historiadores locales para confirmar que ese es, y no otro, el sitio donde se estableció la cuarta villa de Cuba en 1514, la cual fue abandonada en 1522, hace exactamente 500 años, cuando la población se trasladó al lugar que actualmente ocupa la ciudad de Sancti Spíritus.
En torno a Pueblo Viejo, declarado Monumento Nacional en 2014 pero que ha recibido escasa atención desde entonces, se está gestando un proyecto para la creación de un parque demostrativo arqueológico que incluirá los resultados de las investigaciones realizadas en la cuenca de inundación de la presa Zaza, una zona donde se han encontrado otros sitios de transculturación que datan de la época de la conquista, según Álvarez de la Paz.
El Gabinete de Arqueología de la Oficina del Conservador de Sancti Spíritus ha realizado importantes descubrimientos en los últimos años, entre ellos, las ruinas del antiguo ingenio Guadalupe, que presentan evidencias de haber sido incendiadas, lo que respalda científicamente la hipótesis de que esta fábrica de azúcar fue destruida por el fuego en 1870; además de cerca de 300 estaciones arqueológicas relacionadas con el proceso de contacto indo-hispánico y la posterior colonización en el siglo XVI.